TRÁILER DE GAZPACHUELO:
ENLACE DEL DOCUMENTAL EN SCENIKUS:
https://streaming.scenikus.com/producto/gazpachuelo/
Hemos tenido la ocasión de poder hablar con Jorge y que nos cuente detalles de su película, cómo surgió y el peculiar espíritu que ha acabado impregnando su proyecto.
CINE ARTE MAGAZINE: Hola, Jorge. La primera pregunta es obligada. ¿Cómo
ha sido rodar una película y levantar un proyecto como Gazpachuelo en unas circunstancias tan complicadas como las
actuales?
JORGE RIVERA: Bueno, era un rodaje diseñado para este momento tan raro, con dos días de rodaje, un equipo de dos personas en rodaje y cuatro en el equipo en total, pocas localizaciones y velando por que los invitados no se cruzaran y tuviésemos tiempo de airear y desinfectar el set de rodaje. Era un proyecto autofinanciado y sin más ambiciones que tener un proyecto para la segunda mitad de año (que yo preveía negra a nivel laboral) y poder ayudar al comedor social “Yo Soy Tú” de Miraflores de los Ángeles. En pocas semanas, comenzaron a llegar apoyos (Music Library & SFX nos donó la música) y los patrocinadores (Fundación Málaga, Cervezas Victoria y Sabor a Málaga) y empecé a notar interés en redes y prensa. Me ha sorprendido el apoyo recibido, que nunca fue parte del concepto inicial, que era mucho más modesto.
JORGE RIVERA: Es una sopa tradicional muy conocida y querida en Málaga, con un caldo espesado con mayonesa y más de cien variantes recogidas en la provincia por el Dr. Fernando Sánchez Gómez. Se conocen especialmente los gazpachuelos de patata, arroz o pan duro, y los de pescado y marisco, que muchos culminan con un chorrito de amontillado, dándole el nombre de “sopa Viña AB”. Con los años se ha convertido en un plato de experimentación y creatividad para la alta cocina, a la par que en la doméstica.
CINE ARTE MAGAZINE: ¿Cuál es la motivación para hacer un documental sobre este típico plato malagueño?
JORGE RIVERA: La idea surgió porque en un concurso de documentalistas pedían que grabaras a tu abuela haciendo una receta típica, y yo pensé inmediatamente en el gazpachuelo. No salió lo del concurso, pero la idea se quedó en mi cabeza, y, durante el confinamiento de marzo, pensé que podía ser bonito contar algunas historias de Málaga y alejar a la gente de historias tristes o confinadas. Quería hacer algo que fuera a la vez nostálgico y optimista.
CINE ARTE MAGAZINE: ¿Te has llevado muchas sorpresas o has descubierto cosas que no te esperabas durante la confección del documental?
JORGE RIVERA: La primera sorpresa ha sido la acogida previa. Que algo tan sencillo como una sopa popular despierte tanto interés y pasiones me ha sorprendido. Muchas personas hablan de esta sopa, tan rica y humilde a la vez, desde el corazón. He recibido muchos mensajes de Facebook agradeciendo que se hable de nuestra historia, me han dedicado fotos de gazpachuelos… y he aprendido muchísimo. Yo no hago documentales porque sepa de algo, sino para aprender de otros y contar historias, me gusta pensar que el público aprende conmigo. No sabía que había tantas variedades de gazpachuelo, ni de dónde venía la palabra, por ejemplo. Ha sido una fortuna poder hablar con gente que sabe mucho del tema y quieren compartir su conocimiento. Otra sorpresa ha sido lo difícil que resulta traducir el malagueño a otros idiomas… habrá subtítulos en inglés y danés, el primero por el potencial internacional de la historia, y el segundo por mi relación laboral y personal con Dinamarca, donde estuve viviendo 15 años y en la que conservo muchos contactos y un pie, ya que voy a trabajar allí a menudo.
CINE ARTE MAGAZINE: ¿Es Gazpachuelo
un documental estrictamente gastronómico?¿O va más allá y vamos a descubrir
cosas sobre Málaga?
JORGE RIVERA: Bueno, se habla de comida, claro, pero para mí la comida refleja lo que somos o no somos, y en ese sentido creo que el gazpachuelo habla mucho de Málaga… y hasta aquí puedo leer (risas). He intentado hablar del plato a nivel histórico y sociológico, antropológico, si se quiere… pero para nada en plan académico. Los invitados hablan de sus recuerdos de infancia, de sensaciones… Este documental se ha hecho para entretener y picar la curiosidad del espectador, como un primer plato. Que el espectador se pida un segundo y un postre, leyendo libros sobre cualquiera de los temas, se lo dejo a su elección.
CINE ARTE MAGAZINE: Gazpachuelo se
va a estrenar el próximo 15 de noviembre y estará disponible hasta el 20 de
diciembre. ¿Crees que esta modalidad de visión está ya plenamente instaurada y
supone una oportunidad que hay que aprovechar?
JORGE RIVERA: Bueno, plataformas como Netflix, HBO y Prime están más instaladas ya, pero otros modelos como el de Scenikus, más flexibles y accesibles para creadores, han emergido con fuerza durante la pandemia ante la necesidad de los artistas de gestionar sus contenidos de forma rápida y segura. Pensamos que pagar por alquilar un contenido es nuevo, pero no: es como los videoclubs de los 80, pero por internet. Creo que el público mayor de 65 años aún tiene que acostumbrarse a usar el pago electrónico y confiar en la seguridad online, pero es que muchas personas o no tienen medios para ello o nunca han aprendido a usarlos.
El streaming es tanto una oportunidad como una necesidad, a menudo ambas van de la mano. No creo que sea bueno ni malo, simplemente una herramienta nueva que artistas y público tenemos que aprender a utilizar, y que para mí jamás podrá sustituir la experiencia física del cine ni del encuentro con el público, que es algo en lo que hago hincapié como persona de teatro, y que trato de hacer en todos los visionados. La charla con el público, la posibilidad de oir sus ideas tras la proyección, es lo que hace cada pase único, exactamente como en una obra de teatro.
CINE ARTE MAGAZINE: Para acabar, ¿qué les dirías a nuestros lectores
para que les entre la curiosidad para acercarse a tu película?
JORGE RIVERA: Lo primero es que, aunque sepan que es un gazpachuelo, van a ver otros platos que también son gazpachuelos aunque nunca lo hubiesen pensado. Lo segundo, que seguro que van a oir alguna cosa que no habían oído antes: un chascarrillo de las vecinas invitadas a hablar, el título de un libro de uno de los expertos… o quizás alguna anécdota de la historia de Málaga. Y lo último, por lo que me gustaría que muchas personas vieran el documental, más que por orgullo de artista, es porque apoyaran a una buena causa, a la que donaremos el 100% de lo recaudado en el preestreno online y el 50% de todo lo que se recaude en el futuro: el comedor social “Yo Soy Tú”, que da de comer a 1.500 personas al día. Vienen tiempos duros para muchos, y la idea de que un documental de comida pueda dar de comer a otros me parece justicia poética.
Como han podido comprobar, como si fuera un auténtico plato gourmet, Gazpachuelo, por debajo de su apariencia inicial, esconde numerosas capas y matices que van más allá de lo que una primera impresión puede generar. Si no les basta este artículo y, como dice Jorge Rivera, les gustaría un segundo plato y un postre, en los siguientes enlaces encontrarán más información:
Página web de Gazpachuelo: www.gazpachuelo.com
Página web de Jorge
Rivera: www.jrivera.eu
Página web de Gazpachuelo en Scenikus: https://streaming.scenikus.com/gazpachuelo/
Página web de Gazpachuelo en Facebook: www.facebook.com/gazpachuelo
Página web de Gazpachuelo en Instagram: www.instagram.com/gazpachuellower
Página web del comedor social “Yo Soy Tú”: www.comedorsocialyosoytu.com
IMÁGENES DE GAZPACHUELO:
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