EL FESTIVAL DE MÁLAGA 2020 EN 14 MIRADAS (2): LA BODA DE ROSA DE ICIAR BOLLAÍN. ENTREVISTA A MARÍA MAROTO.

 

Si en el primer artículo sobre el Festival de Málaga 2020, con ocasión de Mi gran despedida de Antonio Álamo y Antonio Hens, tuvimos la oportunidad de hablar de la nueva visión sobre las relaciones personales y la identidad propia, ahora, con la película que ha inaugurado la Sección Oficial del certamen, La boda de Rosa de Icíar Bollaín, aunque con un enfoque diferente, seguimos en el mismo territorio de temáticas y preocupaciones.



La boda de Rosa, que se estrena hoy en salas comerciales, es el undécimo film de Icíar Bollaín, que cuenta con una más que interesante filmografía que incluye Hola, ¿estás sola? (1995), Flores de otro mundo (1999), Te doy mis ojos (2003), Mataharis (2007), También la lluvia (2010), Katmandú: Un espejo en el cielo (2011), el documental En tierra extraña (2014), El olivo (2016) y Yuli (2018). En esta ocasión, la directora comanda un reparto encabezado por Candela Peña y en el que también participan Sergi López, Nathalie Poza, Ramón Barea, Paula Usero, Xavo Giménez y María Maroto. Como todas las historias que nos cuenta Icíar Bollaín, por debajo de su aire ágil y fresco siempre esconde mucha enjundia, siempre relacionada con las formas en las que nos relacionamos unos con otros y el modo en que determinadas mentalidades y actitudes nos oprimen y nos restan libertad e iniciativa propia.



Rosa (Candela Peña) es una mujer madura que no es capaz de decir nunca que “no” y, por ello, se ve constantemente sometida a las conveniencias de sus hermanos (Sergi López y Nathalie Poza), de su padre (Ramón Barea), de su novio o medio novio (Xavo Giménez) y de su jefa (María Maroto). Además, tiene una hija (Paula Usero) que vive en Manchester que es, a su vez, madre de dos gemelos y que arrastra sus propios problemas. Un día, Rosa corta por lo sano, rompe con la vida que lleva y se marcha de Valencia a su Benicasim natal, con el fin de inicir una nueva vida. Como forma de sellar su compromiso con ese giro radical, decide organizar una boda consigo misma, algo que provocará la incomprensión de todo su entorno. La boda de Rosa viene a ser la ilustración de un pensamiento que ha ido extendiéndose en los últimos tiempos cuando se reflexiona sobre las relaciones sentimentales y que afirma que no se puede hablar de “buscar nuestra media naranja” porque cada uno de nosotros ya somos, por nosotros mismos, “una naranja entera”. La boda de Rosa, además, explora el tema de las relaciones familiares y cómo las mismas constituyen una forma de presión sobre nuestros fines y nuestras conductas.

TRÁILER DE LA BODA DE ROSA:

Hoy, La boda de Rosa se ha proyectado en el Festival de Málaga como película que inaugura la Sección Oficial y, en la rueda de prensa posterior, hemos podido preguntar a Icíar Bollaín y a Candela Peña sobre el film.

CINE ARTE MAGAZINE: Hola, Icíar. Tu primera película se tituló Hola, ¿está sola? Viendo La boda de Rosa, la respuesta a esa pregunta hubiera sido muy diferente a la que se hubiera dado entonces. La perspectiva sobre la cuestión ha cambiado profundamente, ¿no?

ICÍAR BOLLAÍN: Pues claro que ha cambiado. Han pasado 25 años. Pero, desde la perspectiva cinematográfica, lo esencial creo que no ha cambiado. Quiero seguir contando historias que lleguen, historias con las que nos identifiquemos, historias con mujeres. como Candela, que nos enamoren, hermanos, como Nathalie y Sergi, que nos vuelvan locos pero que también nos enamoren, con una hija tan preciosa como Paula Usero, todo eso es lo que intento, contar historias que lleguen. Y mi alegría es cuando llegan y cuando se disfrutan y cuando se sienten.

CINE ARTE MAGAZINE: Candela, ¿qué ha sido lo más fácil y lo más difícil de tu personaje?

CANDELA PEÑA: Lo más fácil, figúrate con todo este reparto al lado, todo ha sido un estímulo y unas ganas de aprender. No es frecuente tener a tan buenos actores delante tuyo. Entonces, todo esto ha sido una fantasía porque veía a Nathalie y a Sergi y veía a mis hermanos, veía a Ramón Barea y veía a mi padre. Y veía a Paulo Usero y veía a mi hija. Y de la mano de Icíar que me conoce como actriz. Y lo más díficil es que Rosa, aunque no lo parezca, es un personaje con mucha composición. Yo digo que es como una manta de patchwork y que ojalá que no se le vean las costuras. Es un personaje que tiene muchas capas, anda de una manera, se mueve de una manera... No es tan simple como ponerse y decirlo. 



Imagen de la rueda de prensa de La boda de Rosa en el Festival de Málaga 2020, a la que acudieron Icíar Bollaín, Candela Peña, Nathalie Poza, Sergi López, Paula Usero, las productoras Cristina Zumárraga y Lina Badenes y la cantante Rozalén, autora de la canción principal de la banda sonora 


Aparte de asistir a la rueda de prensa de la presentación del film en el Festival de Málaga, hemos tenido la oportunidad de entrevistar a la actriz María Maroto (quien interpreta, recordemos, el papel de jefa de Rosa), con la que hemos revisado su carrera y nos ha hablado de las sensaciones que ha experimentado con la película.


Candela Peña (a la izqda.) y María Maroto (a la dcha.) escuchan atentamente las instrucciones de la directora Icíar Bollaín (en el centro)


CINE ARTE MAGAZINE: Hola, María. Para empezar, ¿podrías contarnos cómo nació tu vocación por la interpretación y cómo fue tu proceso de formación?

MARÍA MAROTO: Siempre digo que fue gracias a las fallas de Valencia. Tendría como mucho 5 años cuando ví mi primer playback y le dije a mi madre que yo quería hacer eso: subirme a un escenario, cantar y bailar. Aunque no he hecho ningún musical todavía, ya llegará. Pero siempre lo tuve muy claro y empecé pronto a formarme. Iba junto con Nuria Herrero a la Escuela del Actor en Valencia los sábados a hacer cursos de iniciación y disfrutábamos mucho.

CINE ARTE MAGAZINE: Tienes una amplia experiencia teatral a tus espaldas. Trabajaste, por ejemplo, en el montaje de El gran teatro del mundo de Calderón de la Barca dirigido por José Luis Alonso de Santos, en los de La indiferencia de los armadillos y Temporada baja de Abel Zamora, bajo la dirección en ambos casos de Sergio Caballero y en el de ¿A quién te llevarías a una isla desierta? de Jota Linares en el OFF Lara. De toda tu carrera teatral, ¿qué papeles destacarías especialmente por su impacto en tu trayectoria como actriz o por el buen recuerdo que guardas de ellos?

MARÍA MAROTO: Para mí, hay dos papeles claves hasta el momento en teatro. El que hice en La Tossudería de Rafael Spregelburd, dirigida por Toni Agustí, en Valencia. Y el de Bella de Yernos que aman de Abel Zamora en la Pensión de las Pulgas. En los dos, me entregué por completo, disfruté y fueron un gran aprendizaje y un punto a marcar en mi cronología.

 

Yernos que aman (arriba a la izqda.) y La Tossudería (abajo a la dcha.), las dos representaciones teatrales más importantes para María Maroto


CINE ARTE MAGAZINE: Has participado en numerosas series de televisión, muchas de ellas ya míticas. Tuviste un papel que se prolongó por 180 episodios en LAlquería Blanca, todo un hito de la televisión valenciana. También te hemos podido ver, en papeles más pequeños, en El tiempo entre costuras, Pulsaciones, Cuéntame cómo pasó, iFamily, Amar es para siempre y en la reciente Señoras del (h()AMPA. También te hemos visto en la TV movie La dona del segle (2018), junto a Elena Martín, Nora Navas, Álex Monner, Bruna Cusí, Marta Larralde, Sergio Caballero, Iris Lezcano… ¿Cómo es el trabajo en televisión y cómo varía (o no) el afrontar un personaje durante gran cantidad de episodios, lo cual supone toda una carrera de fondo, o uno que tiene una intervención más breve en la historia, que se asemejaría más bien a un sprint?¿Hay muchas diferencias entre una serie y una TV movie?

MARÍA MAROTO: Según mi experiencia, estar en tele a ritmo de serie diaria te da tablas. Te da seguridad y soltura y mucho entrene. He podido experimentar ambas cosas y se nota la diferencia. Cuando estaba en L’Alquería Blanca, me sentía tan entrenada que un casting lo hacía más relajada, por ejemplo. Aparte de la estabilidad económica que aporta tener un trabajo “fijo”. En cambio, en estos últimos años he hecho papeles más pequeños y variados y en proyectos muy distintos. Al llegar a rodaje si no estás tan entrenada es más complicado jugar con los fantasmas, las inseguridades y la autoexigencia porque solo tienes ese día para expresar lo que quieres y si no estás fina ya no hay nada que hacer. Eso me ha hecho darme cuenta de que, en mi caso, cuanto más relajada estoy más disfruto y me olvido de la presión. En una TV movie, hay más tiempo para cuidar las cosas y para prepararlas.


María Maroto en una escena de L'Alquería Blanca


CINE ARTE MAGAZINE: Ahora, te vamos a poder ver en La boda de Rosa de Icíar Bollaín, interpretando el personaje de Ana. ¿Cómo fue el camino hasta llegar a formar reparto de esta película?

MARÍA MAROTO: Pues hice una prueba con Icíar y Mireia Juárez, directora de casting. Y la verdad es que me lo pasé súper bien haciéndola. Y me llamaron. ¡¡Y ha sido un gustazo!! 

CINE ARTE MAGAZINE: Como creo que ya no hacemos ningún spoiler, podemos decir que La boda de Rosa trata de una mujer (Candela Peña) que decide casarse, como declaración de principios, con ella misma. ¿Piensas que esta historia representa el gran cambio que se ha producido en nuestra mentalidad actual sobre el papel que queremos que tengan las relaciones sentimentales y la importancia de estimarse a uno mismo?

MARÍA MAROTO:  Creo que es un mensaje que llega en el momento oportuno y que sí, es necesario e inspirador. Invita a reflexionar sobre la prioridad que damos a todo y a todos antes que a nosotras mismas, cuando es la única forma de realmente estar bien y tranquila. Creo que Icíar ha plasmado la idea con humor, frescura, cierta poesía y cotidianidad que hacen que te diviertas con la peli y te emociones al mismo tiempo.


María Maroto en el set de rodaje de La boda de Rosa


CINE ARTE MAGAZINE: ¿Cómo ha sido la experiencia de ser dirigida por una directora tan importante como Icíar Bollaín?

MARÍA MAROTO:  La verdad es que intenté no pensarlo mucho pero me generaba respeto y admiración, igual que con Candela. Pero en el primer ensayo me relajé, fue distendido y me di cuenta de que iba a ser un viaje precioso. En rodaje, el primer día, me sentí más ‘palo’ de lo normal, pero trabajé con ello y al final creo que ha quedado un trabajo bonito.

CINE ARTE MAGAZINE: ¿Y la de compartir reparto con intérpretes como Candela Peña, Sergi López, Nathalie Poza o Ramón Barea?

MARÍA MAROTO:  Lo mismo, no tuve el placer de trabajar con Sergi o Nathalie, aunque coincidimos un día y estuvimos muy a gusto. Pero con Candela fue muy fácil trabajar y me dio mucha confianza y feeling. Nos entendimos muy bien, pero claro que la admiro y al principio me quedaba embobada viéndola trabajar. ¡Hasta que me di cuenta de que tenía que trabajar yo también con ella! Ja, ja, ja…


María Maroto no se perdió un detalle durante el rodaje de La boda de Rosa


CINE ARTE MAGAZINE: ¿Qué le dirías a nuestros lectores sobre La boda de Rosa para que vayan a verla al cine?

MARÍA MAROTO:  Que vayan. Que vayan. Que vayan. Que salimos de un momento mundial muy delicado donde todos hemos valorado el cine y ahora tenemos la oportunidad de disfrutarlo en pantalla grande. Que tal vez llegue un día, espero que no, en que ir al cine sea un recuerdo nostálgico. Que vayan hoy, que vayan con amigos, que se lo pasen bien, que disfruten de la peli y que comenten el mensaje luego mientras cenan o lo que quieran hacer. Pero que vayan, que merece la pena. Que es una peli muy guay. Y vale la pena ver el trabajo que hace también Paula Usero, que emociona. ¡Y se ve la ciudad de Valencia!

CINE ARTE MAGAZINE: Para terminar, ¿qué futuros proyectos en los que participes puedes contarnos en este momento?

MARÍA MAROTO:  Pues tengo un proyecto en el aire que me hace especial ilusión y del que no puedo decir ni mu. Pero antes de eso voy a trabajar en una peli como meritoria de dirección. Me encanta la profesión y he podido explorar la producción y dirección y quiero seguir aprendiendo. Además, considero que así crezco como actriz.


Como ven, La boda de Rosa, que, como hemos dicho, se estrena hoy 21 de agosto en salas comerciales, tiene muchos motivos para interesar al público y que logre enganchar a este con la historia de una mujer que descubre que lo más importante es comenzar a estimarse a ella misma. Algo que conecta muy bien con muchas de las inquietudes y reflexiones del momento actual.

 

IMÁGENES DE LA BODA DE ROSA:









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