TÍTULO: Aute Retrato. TÍTULO ORIGINAL: Aute Retrato. AÑO: 2019. NACIONALIDAD: España.
DIRECCIÓN: Gaizka Urresti. GUION: Nacho Cabana, Juan Moya, Gaizka Urresti. MONTAJE:
Juan Moya. DIRECCIÓN
DE FOTOGRAFÍA: Pepe Añón. PERSONAS QUE INTERVIENEN: Luis Eduardo Aute, Miki Aute, Ana Belén, Borja
Casani, Jaime Chávarri, Jorge Drexler, Antonio Escohotado, Antonio Fraguas
‘Forges’, Gonzalo García Pelayo, Pedro Guerra, Rosa León, Víctor Manuel, Dani
Martín, Marwan, Massiel, Carlos Montero, Jesús Munárriz, Miguel Munárriz, Luis
Pastor, Miguel Poveda, Silvio Rodríguez, Rozalén, Joaquín Sabina, Ismael
Serrano, Joan Manuel Serrat, Pastora Vega… DURACIÓN: 98
minutos. PÁGINA WEB OFICIAL: https://www.auterretrato.es/.
Profundizar en la obra de Luis Eduardo Aute es
llegar a conocer a un artista integral que no solo es cantautor (su
faceta más conocida por el público, con 25 álbumes de estudio, 4 en directo y 8
recopilatorios) sino también poeta (ha publicado casi 20 poemarios, el
primero, La matemática del espejo, editado
en 1975 por Ángel Caffarena, para continuar, entre otros, con Canciones y poemas – 1976–, La liturgia del desorden – 1978–, Canciones – 1980–, Templo de carne – 1986–. Canciones
2 – 1991–, animaLuno – 1994–, animaLdos – 1999–, animaLtresD – 2005–, animaLhada
– 2005–, animaLhito – 2007–, No hay quinto aniMaLo – 2010–, Claroscuros y otros pentimentos – 2014–),
pintor (ha realizado desde 1960 casi 30 exposiciones individuales y
participado en 13 exposiciones colectivas), compositor de bandas sonoras
para cine y televisión (entre otras, las de Emilia… parada y fonda – 1976– de Angelino Fons, Los viajes escolares – 1976– de Jaime
Chávarri, la serie de TV La señora García
se confiesa – 1976–, Mi hija
Hildegart – 1977– de Fernando Fernán-Gómez, La viuda andaluza – 1977– de Francesc Betriu, ¡Arriba Hazaña! – 1978– de José María Gutiérrez Santos, El hombre de moda – 1980– de Fernando
Méndez-Leite, Juego de poder – 1983–
de Fausto Canel, El viaje de Penélope –
2010– de Fernando Merino) e, incluso, cineasta (habiendo dirigido 3
cortometrajes, A flor de piel – 1974–,
Minutos después – 1976–, Chapuza – 1976–, el segmento “Delirios 2”
del film Delirios de amor – 1986–, el
episodio “La pupila del éxtasis” de la serie de televisión Delirios de amor – 1986– y el largometraje de animación Un perro llamado Dolor – 2001–).
Si he querido ser tan relativamente exhaustivo con la obra de Aute es para mostrar del modo más completo posible todo el
trabajo (inmenso) de un creador al que muchos reducirían a sus éxitos en la
década de los 80 y a un puñado de grandes canciones (clásicas, míticas,
imprescindibles, hay muchos adjetivos que pueden ser aplicables y que son
usuales en los medios de comunicación) como “Rosas en el mar”, “Aleluya nº1”, “Al
alba”, “De alguna manera”, “Cine, cine”, “La belleza”, “Slowly” o “Mira que
eres canalla”. Pero Aute es mucho más que ese tipo de esquemas reduccionistas (capaces
de dejar resumida a la generación del 27 en la famosa foto tomada en el Ateneo
de Sevilla) con los que, como suele ser habitual en nuestro país, solemos
despachar a las grandes figuras de nuestra cultura, en parte por pereza, en
parte por ignorancia, en parte por arrogancia y, en gran medida, porque en
España cuesta horrores admitir que la genialidad pueda residir en obras que no
están asociadas a éxitos masivos de público y ventas. A fin de cuentas, admitirlo
significaría poner en cuestión los mecanismos (sociológicos e industriales) por
los que se rige el sistema cultural de nuestro país (y, en el fondo, no solo
cultural). Pero es que, además, Luis Eduardo Aute se ha atrevido a ser siempre
completamente libre en sus creaciones (quizás imprudentemente, tal como se
relata en este documental a la hora de hablar de su álbum Templo, editado en su etapa de grandes triunfos comerciales) y no
dejarse llevar ni por el conformismo ni por las modas ni por los gustos
mayoritarios. Y, como otro elemento más que distingue a la personalidad del
artista, está el evitar toda grandilocuencia y tener el atrevimiento de hablar
de grandes temas de la vida en un tono de media voz y como en un susurro que
hablara por sí mismo, sin necesidad de alzar el volumen ni de soltar gritos
innecesarios. Algo que, evidentemente, va en contra de lo que vivimos en
nuestro día a día cotidiano…
No sé si todo lo que les he dicho pertenece
estrictamente al documental Aute Retrato de
Gaizka Urresti, pero sí puedo decir que es lo que me ha inspirado la visión del
mismo y supongo que, según el tipo de espectador de que se trate, variará la
percepción que reciba. Para quienes conozcan todos los aspectos de la obra de
Aute, la película les supondrá una revisión de sus creaciones, la aportación de
valiosos testimonios de muchos de sus amigos y compañeros de profesión y la
revelación de muchos aspectos desconocidos de su vida. Pero para quienes solo
conozcan parte de su obra como cantautor o sea una primera toma de contacto con
la misma (que, creo, serán la mayoría), les permitirá descubrir a un creador
integral y volcánico que ha influido en multitud de artistas de varias
generaciones y cuya amplitud y continuidad en el tiempo desmiente cualquier
afán aleatorio y errático sino que nace de un conjunto de motivaciones bien
precisas y definidas (la ardua labor que le supuso el largometraje Un perro llamado Dolor así lo confirma).
Una dimensión de Aute Retrato que lo convierte en un documental plenamente vivo se
refiere al giro que sufre su relato cuando, en pleno rodaje, se produce el
infarto que deja en coma a Luis Eduardo Aute y del que se recuperará pero
sufriendo secuelas que aún está superando. La película, entonces, pasa a
desenvolverse en torno al concierto de homenaje que se le hace en el Wizink
Center de Madrid el 10 de diciembre de 2018. Dicho concierto se convierte en el
hilo conductor que enlaza todos los hilos temáticos de la película y logra
darle, a la vez, agilidad y hondura, en la medida en que permite repasar toda
la trayectoria de Aute a la vez que los participantes en el mismo explican el
impacto que su obra les ha causado y la huella que ha dejado en sus respectivas
carreras. En suma, por todo ello, Aute
Retrato se convierte en un documento fundamental para quien quiera empezar
a profundizar en la obra del artista y comprender una personalidad rica,
diversa y casi inabarcable que es todo un ejemplo de creatividad, independencia
y de reivindicación de la pureza artística.
TRÁILER DE LA PELÍCULA:
IMÁGENES DE LA PELÍCULA:
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