EN LAS ESTRELLAS DE ZOE BERRIATÚA. EL CINE COMO ADICCIÓN

En las estrellas de Zoe Berriatúa, fue estrenada en salas comerciales el pasado 31 de agosto de 2018. Con motivo de su estreno en Netflix, publicamos reseña de la película.

TÍTULO: En las estrellas. TÍTULO ORIGINAL: En las estrellas. AÑO: 2018. NACIONALIDAD: España. DIRECCIÓN Y GUION: Zoe Berriatúa. MONTAJE: Emilio González. DIRECCIÓN DE FOTOGRAFÍA: Iván Román. MÚSICA ORIGINAL: Iván Palomares. INTÉRPRETES PRINCIPALES: Luis Callejo, Jorge Andreu, Macarena Gómez, José Luis García Pérez, Ingrid García-Jonsson, Kiti Mánver, Magüi Mira, Saturnino García, Liz Lobato. DURACIÓN: 86 minutos. PÁGINA WEB OFICIAL: https://zoeberriatua.com/project/en-las-estrellas/ .

CALIFICACIÓN: 

Podemos decir que “el cine dentro del cine” es, prácticamente, un género cinematográfico independiente. Son legión las películas que hablan de rodajes, del mundo de Hollywood, de la pasión por el séptimo arte… Films en los que el cine habla de sí mismo, se autoanaliza, a veces hasta se autopsicoanaliza (algo imposible por definición) e intenta descubrir cuáles son sus propios mecanismos de atracción y de gravitación. Recordemos la pionera El moderno Sherlock Holmes (1924) de Buster Keaton, antes de continuar la lista con Cautivos del mal (1952) de Vincente Minnelli, La noche americana (1973) de François Truffaut, Recuerdos (1980) de Woody Allen, Pasión (1982) de Jean-Luc Godard, Good morning, Babilonia (1987) de Paolo y Vittorio Tavaiani o el reciente estreno en Netflix de una de las obras inconclusas de Orson Welles, Al otro lado del viento (2018), la cual ya comentamos anteriormente en esta revista. El cine español también tiene numerosas películas de este género. Hasta cabría decir que lo normal es que aquí se hicieran muchas más películas de este tipo que en otros lugares. Básicamente, porque con las dificultades que siempre ha habido en nuestro país para hacer cine, y que, a pesar de ello, abunden los realizadores que, contra viento y marea, siguen afrontando proyectos y culminándolos, era necesario comprender cuál era el origen de esa ansia y de ese ímpetu, que siguen vivos a pesar de la hostilidad de las circunstancias. Ahí están la temprana Vida en sombras (1949) de Lorenzo Llobet Gracia, la clásica Arrebato (1979) de Iván Zulueta o La niña de tus ojos (1998) de Fernando Trueba para demostrarlo. Si recuerdan el final de estas dos películas, la conclusión no era muy esperanzadora. (¡Ojo!, vienen spoilers en la siguiente frase). En Arrebato, Eusebio Poncela acababa fusilado por una cámara con el fin de vivir eternamente joven dentro de un fotograma perpetuo y, en La niña de tus ojos, Antonio Resines acababa solo y desengañado en su esfuerzo por llegar a hacer una película a cualquier precio, aunque fuera contemporizando con los nazis.

Ahora, en el último film de Zoe Berriatúa, En las estrellas, se ahonda en esa pasión irracional o, como mínimo, altamente temeraria. Y lo hace de una manera que sorprende en relación a cómo fue su opera prima, Los héroes del mal (2015). Porque si esta era un retrato descarnadamente realista de unos chavales marginados, en su segundo film Berriatúa prescinde de todo naturalismo y opta por una fantasía delirante y poética, muy cercana al cine de Jean Cocteau – La sangre de un poeta (1932), La bella y la bestia (1946), Orfeo (1950)– o Michel Gondry – ¡Olvídate de mí! (2004), La ciencia del sueño (2006)– en la que la escenografía nos envuelve, desde el primer minuto, en un mundo irreal dominado a partes iguales por la emoción y el desencanto.

En las estrellas tal vez se desarrolla en un futuro distópico, más analógico que digital, en el que solo quedan las ruinas de eso que, hoy, llamamos cine. O, a lo mejor, es sólo una metáfora de la situación actual del séptimo arte, en la que los aventureros (el pasado, el mundo analógico) apenas tienen la posibilidad de sobrevivir y en la que oligopolios, duopolios y grandes plataformas (el presente, el mundo digital) son las que dominan el mercado. En cualquier caso, en ese escenario, Luis Callejo interpreta al que, quizás, sea el último director romántico, al último soñador que quiere levantar una película desde la nada, en condiciones precarias y poco menos que con la ilusión como único recurso “financiero”. Porque ya, con anterioridad, la última película que hizo lo llevó a la ruina. Es decir, En las estrellas se trata de una fantasía pero encierra en su interior mucha más realidad de lo que parece.

Envueltos en ese entorno barroco y desconectado (como hemos visto, solo parcialmente) de la realidad cotidiana, Zoe Berriatúa sabe llevar muy bien el peso de la historia y todo el reparto sin excepción (empezando por el propio Luis Callejo y siguiendo por el niño Jorge Andreu y por Macarena Gómez, Kiti Mánver, Magüi Mira, Ingrid García-Jonsson, José Luis García Pérez…) logra proporcionar plena credibilidad a sus personajes a pesar de la naturaleza de la historia. Historia en la que, como pasa al final con todos los directores que, obsesionados por su afán, tienen que rodar continuamente para seguir sintiéndose vivos (Jess Franco, siempre en la memoria), se produce, al final, el milagro: porque los espectadores seremos testigos de esa película imaginaria, de esa película imposible que, ya dibujada en la mente de un realizador, acaba materializándose ante nuestros ojos. Y, con ello, Zoe Berriatúa tal vez nos está diciendo que, mientras haya quien imagine relatos audaces y arriesgados, el cine de siempre puede seguir existiendo. Aunque sea como sutil Caballo de Troya en medio de un pretendido “pensamiento único”, tan llamativo como discutible.

TRÁILER DE LA PELÍCULA:

ESCENAS DE LA PELÍCULA: